Nuestro primer pan Casero.

Siempre he querido hacer pan en casa pero nunca encontraba la receta adecuada porque algunas eran demasiado complicadas, otras requerían una panificadora, que si los ingredientes eran difíciles de conseguir y yo no hacía más que pensar......¡si es pan! tiene que haber una forma más sencilla de hacer este alimento tan básico. Y de repente, leyendo el blog de Bizcocho de Chocolate encontré aquí la receta perfecta (bueno, cambié alguna cosilla porque por ejemplo no tenía el tipo de recipiente que pedía la receta) y ¡¡Voilá!!

Quedó estupendo, crujiente por fuera y blandito y esponjoso por dentro y la receta no puede ser más fácil, así que si queréis probarlo aquí os la dejo:

Ingredientes:

- 300g de harina de trigo normal.

- 600g de harina de fuerza (yo compré la de Gallo pero cualquier otra marca vale igual)

- 300ml de agua.

- 3g de levadura seca de panadero (la tienen en cualquier supermercado, yo la compré en Mercadona)

- 6g de sal.

- Harina extra para espolvorear.

Modo de hacerlo:

En un bol grande pones todos los ingredientes secos y los mezclas. A continuación añades el agua y lo mezclas todo. Yo empecé usando una cuchara de madera por no mancharme las manos pero al final me pareció más fácil mezclarlo manualmente.

Una vez que está todo bien mezclado, tapamos el bol con papel film y un trapo. Dejamos reposar la masa a temperatura ambiente (yo no me dí cuenta y lo metí en la nevera pero aún así salió bien) unas 24h aunque en verano parece ser que no hace falta dejarlo tanto tiempo.

Al día siguiente la masa habrá crecido y estará llena de pequeñas burbujas. Espolvorea la zona donde vas a trabajar la masa con un poco de harina. Ahora toca amasarla un poquito y formar una especie de rectángulo, y la pliegas sobre sí misma, es decir de derecha a izquierda y de arriba a abajo. Le das la vuelta y pones la bola de masa sobre un papel de horno también espolvoreado con un poco de harina. Lo tapas (por ejemplo con el bol donde estaba la masa) y lo dejas unos 45 minutos.

Un rato antes de terminar los 45 minutos enciendes el horno a 250ºC con calor sólo por la parte de abajo. Colocas el recipiente vacío donde vas a hornear el pan y lo dejas calentar unos minutos. Cuando esté caliente, lo sacas, lo espolvoreas con un poco de harina para que no se pegue el pan y colocas la masa dejando la parte lisa en la parte de abajo y los pliegues hacia arriba. Tapa el recipiente con papel de aluminio (en la receta original usan un recipiente con tapa pero como no tenía usé el papel de aluminio) y lo metes en el horno a 250ºC durante 30 minutos.

Una vez transcurrido ese tiempo, quitamos el papel de aluminio y lo dejamos horneando unos 10 minutos más o menos (dependiendo si nos gusta el pan más o menos tostado) para que se dore la parte de arriba. Yo en este momento le puse un poco el ventilador del horno.

Lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar en una rejilla. Queda un pan tipo montañes o chapata buenísimo. Para cortarlo no os olvidéis de un buen cuchillo de sierra grandecito, estupendo para este tipo de cortes y para no cargarnos ningún cuchillo con hoja lisa. 

¿Qué os ha parecido?¿Os animaréis a hacerlo?

¡Espero que os gusten mis cosillas!